En la sociedad actual, la mayoría de las mujeres alrededor de los cuarenta años pasan sus días en modernas oficinas – respondiendo correos electrónicos, participando de reuniones de intercambio de ideas y socializando durante el almuerzo. Sin embargo, existe otra faceta de la “rutina diaria” que le agrega un giro inesperado al mundo del trabajo.
Descender colinas de 5,000 pies y esquiar a toda velocidad entre montañas solamente accesibles mediante helicóptero puede sonar como una aventura llena de acción, pero es un día típico en la vida de una entusiasta esquiadora de 50 años.
La ex esquiadora extrema Kim Reichhelm aún sería considerada “extrema” por cualquier persona normal. Tiene en su haber dos Campeonatos Mundiales de Esquí Extremo y títulos tanto de los Extremos de Estados Unidos como Sudamericanos. Ha esquiado para el equipo de Estados Unidos y el Tour Profesional de Mujeres y se desempeña frecuentemente como comentadora deportiva para varias cadenas de televisión.
Para Kim, se trata de más que de un hobby y una manera divertida de pasar el tiempo. Esquiar es su pasión y su trabajo. Por más de 23 años Kim ha sido una esquiadora profesional y guía privada de esquí trabajando con fanáticos del esquí provenientes de todo el mundo. Las lecciones particulares, visitas guiadas para grupos y campamentos de esquí extremo la mantienen ocupada y equivalen a mas de 150 días sobre esquíes cada año.
Su pasión no se enfoca solamente en las colinas – también la lleva a las aguas de Baja donde pasa considerables períodos de tiempo practicando surf. Sus actividades de tiempo libre seguramente resulten intrigantes hasta para el atleta profesional más condecorado.
La energía de Kim proviene de su Carrera sobre esquíes. El tiempo que ha pasado entrenando, enseñando y guiando a hombres y mujeres para alcanzar su máximo potencial en el deporte contribuye grandemente a su vitalidad. A su vez trabaja en la industria del esquí de manera independiente como consultora sobre diseños para esquí y cuenta con una lista de auspiciantes que confían en ella y la apoyan.
Por estas razones cuando Kim sufrió una dura caída que aplastó su brazo derecho contra la nieve dura dislocándolo por completo en diciembre del 2008 supo enseguida que tomaría las medidas necesarias para resolver el problema y lograr que su hombro quedara como nuevo.
“Dependo de mi estado físico para poder hacer mi trabajo. Mi vitalidad es mi carrera y si estoy lesionada simplemente no puedo trabajar. Mi objetivo era encontrar el mejor tratamiento para mi lesión y sabía que lo encontraría en La clínica Steadman.”
Si bien Kim se había sometido a numerosas cirugías ortopédicas reconstructivas en el pasado, nunca se había lesionado el hombro derecho con anterioridad y éste se encontraba en perfectas condiciones antes de su caída. Se la refirió al Dr. Millett, con quien se encontró poco tiempo después de su lesión. Luego de discutir su lesión, examinarla cuidadosamente y realizarle una resonancia mangnética el Dr. Millett concluyó que Kim padecía de una lesión que incluía desgarros sobre el tendón del bíceps y el labrum.
Como rencontrarse con un viejo amigo…
“Mi primer encuentro con el Dr. Millett fue como rencontrarme con un viejo amigo. Me preguntó sobre mi vida, mi trabajo, mis hobbies y realmente se tomó el tiempo de examinar mi lesión y mi estilo de vida de modo de definir un plan de acción racional. Su compasión y conocimiento realmente me dejaron anonadada. Fue totalmente diferente a mis experiencias anteriores con cirujanos ortopedistas. Entendió la realidad de mi trabajo y que yo no podía permanecer desocupada durante los meses de invierno. Juntos llegamos a un compromiso para recuperar mi hombro de la mejor manera posible hasta que yo pudiera visitarlo nuevamente para una segunda evaluación.”
La segunda evaluación llegó pronto para Kim. Durante semanas intentó cuidar su hombro y si bien lograba hacerlo funcionar, solamente podía rendir un 80% en el trabajo. Durante la evaluación El Dr. Millett determinó que Kim debía someterse a cirugía artroscópica de hombro para recuperarse de sus lesiones de hombro o corría el riesgo de nunca más poder rendir a su máximo potencial.
En agosto del 2009 Kim se sometió a cirugía artroscópica de hombro para reparar sus lesiones del tendón del bíceps y cartílago labral, estructuras importantes cuya lesión puede generar dolor considerable. La cirugía se realizó mediante artroscopia mínimamente invasiva lo que permitió una recuperación acelerada. Kim padecía de una lesión llamada SLAP (Labrum superior anterioposterior,por sus siglas en inglés) y un desgarro del tendón del bíceps, el tendón del músculo de la región superior del brazo, que ingresa hasta el hombro y es particularmente vulnerable a las lesiones en las personas activas. Ambas estructuras anatómicas fueron cuidadosamente reparadas durante la cirugía.
“Fue surreal. Terminé mis clases de esquí en Chile, volé a Vail y en horas ya estaba lista para la cirugía. La cirugía salió muy bien y en cuestión de horas del postoperatorio el Dr. Millett me envió a su terapeuta físico para comenzar ejercicios pasivos de movimiento. Mi estadía en la Clínica Steadman fue increíble – cómoda y reconfortante. El proceso de curación estuvo caracterizado por mi compromiso por hacer todo lo que el Dr. Millett me había indicado en términos de reposo, terapia física y adhesión a su protocolo.”
Las semanas siguientes a la cirugía Kim fue estricta al seguir las instrucciones de rehabilitación del Dr. Millett. Se tomó un tiempo libre en el trabajo y permitió reposar a su hombro permitiéndole curarse. Realizó ejercicios diarios para fortalecer su hombro teniendo cuidado de no agotarse. Ocho semanas luego Kim pudo volver a surfear y a los 3 meses retomó todas sus actividades de esquí y sus obligaciones como consultora sin preocupaciones ni demoras.
Kim encuentra divertido el hecho de que durante los meses previos a la cirugía se las ingenió para “seguir con la corriente” y volar bajo el radar con una lesión que hubiese sido completamente incapacitante para muchos. Un año luego de su lesión del tendón del bíceps y cartílago labral Kim está feliz y su hombro se encuentra mejor que nunca. Recuperó la rotación completa y fuerza completas con cero dolor y mucha confianza; y se encuentra de nuevo sobre sus esquís dominando los agrestes terrenos y empinadas cuestas de Chile, Colorado y Alaska, y sobre su tabla de surf remando en las aguas de Baja.
“De todas mis cirugías, mi experiencia con el Dr. Millett fue simplemente única. Se conecta con sus pacientes en tantos niveles que va mas allá para realmente comprender lo que está en riesgo. La relación que construye con sus pacientes se convierte en un sostén frente al dolor y la desolación que pueden surgir durante el proceso de la cirugía y la recuperación. Mi hombro está como nuevo y mis preocupaciones, miedos y ansiedades se han marchado por completo. Todo se lo debo al Dr. Millett.”
Decir que Kim volvió a la normalidad sería faltar a la verdad. Un día después de que la entrevisté para este artículo se encontraba en camino a Alaska como guía de un tour para fanáticos del esquí extremo. Para ella, esquiar en pendientes empinadas en senderos estrechos esquivando árboles es simplemente otro día en su vida.